Los sitios Web pueden tener desde una sóla página hasta cientos, dependiendo de cada compañía, lo que vende, lo que busca comunicar y cómo lo busca comunicar.
Sin embargo, para un sitio de comercio electrónico simple, que vende productos, nueve páginas pueden ser simplemente las adecuadas.
Un buen sitio Web inicia con una página de inicio (Home Page) de fácil y rápido acceso; es decir que no cuente con gráficas, sonidos o videos complicados que hagan su descarga una pesadilla para el visitante.
Desde tu Home Page, debes dejar bien claro a tus visitantes qué es lo que ofreces; quién eres y por qué estás allí. Asimismo, debes dejar bien claro, desde el inicio, cómo navegar por el resto de tu sitio (si es que vas a manejar varias páginas).
Las ligas (links) a otras secciones de tu sitio deben desplegarse claramente en tu página principal. Una sección muy común y fácil de implementar es un Mapa del Sitio (site map) en la que dejes bien claro qué información contiene tu sitio Web y cómo acceder a cada página.
Es muy recomendable, también, contar con una página “Sobre Nosotros” o “Quiénes Somos”. Aquí deberás incluir una breve historia sobre tu negocio, cuál es su misión, quiénes integran tu equipo de colaboradores y por qué es imprescindible que hagan negocios contigo. Si te han realizado alguna entrevista o tu empresa ha sido perfilada en algunos medios de comunicación, no olvides incluirla en esta liga.
Esta sección es particularmente importante para empresas poco conocidas y generalmente pequeñas. Unos pequeños párrafos, bien escritos, sobre tu negocio y sobre tu persona te ayudarán a que tus visitantes tengan confianza en ti y en tu empresa.
Puedes incluir una página adicional de contactos. “Contáctenos” es sumamente importante para que tus visitantes sepan que te pueden contactar por otros medios que no sean necesariamente tu página Web o tu correo electrónico. Establece dónde estás ubicado físicamente, así como el teléfono o fax donde pueden localizarte en caso de consultas adicionales. Esto también te ayudará a fomentar la confianza entre tus visitantes. Mientras más información sobre cómo contactarte, será mejor.
Los clientes tienden a desconfiar de las empresas poco conocidas que, además, se ocultan tras una página web para no dar mayores detalles sobre su operación.
Puedes también incluir una página de Preguntas Frecuentes; comúnmente conocida como FAQ (por sus siglas en inglés) en las que respondes a las preguntas más básicas que puede tener tu visitante promedio. Por ejemplo: ¿cómo comprar en línea? ¿qué tipo de privacidad ofrecen?
Por supuesto que tu página más importante será aquella que ofrezca información sobre los productos o servicios que ofrece tu negocio. Ésta deberá incluir información detallada (costos, especificaciones, artículos relacionados, etc.) con tu negocio en sí. Dependiendo de lo que vendas, ésta puede ser una sola página o varias. Tal vez si manejas varias categorías, puedes tener una página por cada categoría o producto.
Ofrece a tus visitantes una navegación fácil por tu sitio. Haz que siempre les sea posible regresar a la página principal (home page) desde cualquier otra página mediante un simple click.
Si tu sitio cuenta con muchas páginas, el diseño será crucial para no perder y confundir a tus visitantes. Y es que necesitarás asegurarte de que tu sitio sea fácil de navegar y de buscar. Es muy fácil perderse en un sitio Web que tenga 100 o más páginas.
Un sitio Web no tiene por qué ser gigantezco e incluir miles de páginas para ser exitoso. Simplemente necesita ser claro, conciso y tan largo como tenga que ser, dependiendo de las necesidades de cada negocio.